Sentadillas Comenzamos la rutina de pierna con seis series de sentadillas de las cuales, las dos primeras, las usaremos a modo de calentamiento. Esas dos primeras series las haremos con pesos muy bajos aumentándolos, para acercarnos al peso que usaremos en la primera serie efectiva. Luego haremos cuatro series más, incrementando el peso poco a poco y bajando el número de repeticiones, pero manteniéndonos siempre dentro del rango de 8 y 12 por serie. Es importante, entre otras cosas, hacer sentadilla profunda bajando el glúteo más allá de la altura de nuestras rodillas. Para hacer este ejercicio nos colocamos la barra sobre los hombros sujetándola con ambas manos y llevando los codos atrás para que esta recaiga sobre la parte alta de la espalda. En esta posición comenzamos a flexionar las rodillas para bajar llevando los glúteos ligeramente hacia atrás y manteniendo la espalda recta en todo momento. Una vez superada la altura del glúteo comenzamos a subir hasta quedar completamente erguidos. La prensa me parece un ejercicio magnífico para realizar al final del entrenamiento de piernas ya que nos permite usar pesos altos y sentir cada repetición. En este caso nos moveremos en un rango alto de repeticiones haciendo tres series de 12 repeticiones cada una. Con las elevaciones de gemelos lograremos activarlos para que estos se desarrollen. Este ejercicio se puede hacer en multipower, con mancuernas o en máquina. En cualquiera de las tres opciones debemos apoyar las punteras en algún lugar elevado para lograr hacer el rango completo del movimiento y mantener la posición más elevada durante un segundo para sentir la contracción. Con este ejercicio, las zancadas, vamos a lograr trabajar toda la pierna, principalmente los cuádriceps. En este caso nos moveremos en un rango de diez repeticiones con cada pierna dando un total de 20 pasos. Deberás usar un peso alto que te permita agotar las piernas en cada serie.