Lo primero que haremos cuando el paciente entra por nuestra puerta será preguntarle cuál es la razón por la que acude a nosotros y pedirle que nos indique dónde se localiza su dolor.
Anamnesis es uno de los aspectos más importantes a la hora de realizar nuestra historia clínica, por lo que nos tomaremos el tiempo que sea necesario para llevar a cabo todas las investigaciones que creamos oportunas.
Os haremos preguntas acerca de cómo y cuándo comenzó el dolor, en qué momentos y con qué actividades es más intenso, qué hábitos de vida tenéis, si habéis sufrido el mismo tipo de dolor previamente o alguna otra lesión en la zona, si lleváis a cabo algún tratamiento farmacológico o tenéis algún antecedente médico relevante, si disponéis de pruebas diagnósticas relacionadas con vuestra consulta.
Se trata de otra de las fases principales en nuestra primera visita, mediante la que extraemos información sobre las estructuras implicadas en vuestro problema.
Estos datos nos servirán de gran ayuda para guiarnos hacia nuestra orientación diagnóstica.
En primer lugar, llevaremos a cabo una valoración general del paciente, tanto estática como dinámica, en la que observaremos su postura y alineación corporal, su biomecánica a la hora de realizar movimientos que puedan resultarnos de interés.
Posteriormente, pasaremos a realizar pruebas más específicas en la zona de dolor: tests de movilidad articular y fuerza muscular, test ortopédicos para valorar estructuras concretas, palpación de los tejidos afectados por el dolor.
Basándonos en los puntos anteriores y en los datos recogidos, intentaremos alcanzar una “impresión diagnóstica” que pueda dar respuesta a vuestra consulta.
Desarrollaremos un plan de tratamiento personalizado para abordar las necesidades específicas de cada paciente y lesión, que comenzaremos a aplicar ya dentro de esta primera sesión.
Este tratamiento puede incluir terapia manual, ejercicio terapéutico, uso de equipos especializados, técnicas invasivas.
Nuestro objetivo será conseguir alivio y mejora en la zona de dolor, así como ayudar a nuestro cuerpo en el proceso de recuperación y regeneración de los tejidos dañados.
Finalmente, te explicaremos una serie de pautas que podrás seguir en tu domicilio para complementar el tratamiento llevado a cabo durante la sesión.