Conoce la técnica: conocer muy bien la técnica antes de realizar la actividad, ya que una técnica incorrecta de levantamiento de pesas puede provocar esguinces, torceduras, fracturas y otras lesiones dolorosas.
Calentar previamente: Los músculos fríos tienen más probabilidades de sufrir lesiones que los músculos en calor.
Antes de levantar pesas se debe calentar de 5 a 10 minutos, tanto las manos, las muñecas como los tobillos, y esta debe ser una rutina que se debe realizar de manera constante antes de realizar cualquier tipo de ejercicio o actividad.
El cuerpo debe adoptar la forma correcta: Al levantar pesas se debe usar toda la amplitud de los movimientos de las articulaciones.
En cuanto mejor se realicen los ejercicios mejores serán los resultados y existirá menos probabilidad de lesión.
Conservar la forma adecuada del cuerpo es importante, incluso cuando se recoge o reemplazan las pesas.
Levantar el peso adecuado: levantar un peso que se pueda realizar con una serie de 12 a 15 repeticiones.
A medida que se va adquiriendo fuerza y rutina, se puede ir aumentando de forma gradual la cantidad de peso.
Usar guantes: los guantes ofrecen un agarre más cómodo, evitando la aparición de molestias en las manos o dolor por la presión de las pesas.
Así mismo evitan que el sudor haga que las manos se resbalen, dando mayor firmeza al agarre
No exigirse demasiado.
Para la mayoría de las personas, completar una serie de ejercicios hasta la fatiga suele ser suficiente.
Las series adicionales pueden llevar más tiempo y causar lesiones por sobrecarga.
No obstante, la cantidad de series que hagas puede variar según tus objetivos de ejercicio.
El dolor como alerta: Si un ejercicio causa dolor se debe dejar de realizar.
Se recomienda intentar realizar el ejercicio unos días después y con menos peso.
La Tendinopatía puede presentar, entre otros factores, por un sobre uso del tendón, dolor, edema y una menor tolerancia y funcionalidad de la extremidad a la acción de la carga, por lo que se recomienda, como un primero tratamiento de la dolencia, el uso de medicamentos antiinflamatorios, terapia física, calor local o infiltraciones.