Si experimenta dolor de muñeca en ejercicios como yoga, durante rutinas de calentamiento o ejercicios de resistencia con pesas, trate de cambiar el peso a los antebrazos en lugar de a las manos. Igualmente, todo lo que necesita para ejercitar el “core” es una esterilla y algo de determinación. Levantamientos de piernas, abdominales tipo “crunch” y variaciones de la plancha son también formas de activar ese grupo de músculos básicos. Es más, el uso de bandas de resistencia suele infravalorarse, pero también son una manera estupenda de estirar y trabajar los músculos. Cuando padece de esta lesión, es el momento perfecto de centrarse en sus extremidades inferiores. Caminatas a paso ligero, hacer footing o entrenamiento de sprint de intervalos altos pondrán a tono su frecuencia cardiaca en muy poco tiempo. Igualmente, centrarse en el entrenamiento de fuerza de las extremidades inferiores, con ejercicios como sentadillas con pesas es una forma estupenda de recuperar la fuerza en todo el cuerpo. Recuerde elegir una muñequera que le sujete bien la muñeca cuando haga ejercicio. El soporte adecuado puede sujetar bien una muñeca lesionada. Dependiendo de la gravedad de su lesión, juntos pueden trabajar en un programa de ejercicios que le ayude a mantener una línea base de forma física y fuerza sin agravar más la lesión en sí. Recuerde también que reposar durante el periodo inicial de la lesión ayudará a potenciar la curación.