La fisioterapia desempeña un papel fundamental en la rehabilitación del ACV, promoviendo la recuperación neurológica y mejorando la calidad de vida de los pacientes. A través de un tratamiento integral y personalizado, la fisioterapia ayuda a recuperar la movilidad y la funcionalidad de las áreas afectadas. La fisioterapia es esencial para la recuperación de los pacientes con ACV, ya que facilita la recuperación neurológica y la readaptación del cuerpo después del evento. La rehabilitación mediante fisioterapia no solo se enfoca en el aspecto físico, sino también en la reeducación del cerebro para restaurar las funciones motoras.
A través de ejercicios terapéuticos y técnicas específicas, se estimulan las conexiones neuronales para que el cerebro aprenda a reorganizarse y a utilizar nuevas vías para controlar el cuerpo. Los ejercicios de movimiento y fortalecimiento son fundamentales en la rehabilitación del ACV, ya que se enfocan en recuperar la fuerza muscular y la movilidad de las extremidades afectadas. La reeducación motora se centra en enseñar nuevamente al cerebro y al cuerpo cómo realizar movimientos básicos, como levantar un brazo o caminar.
La electroestimulación y la tecnología robótica son herramientas cada vez más utilizadas en la rehabilitación de pacientes con ACV, especialmente en los casos en los que el paciente tiene una movilidad reducida. El principal objetivo de la fisioterapia en la rehabilitación del ACV es mejorar la calidad de vida del paciente, permitiéndole recuperar la independencia y la capacidad para realizar actividades diarias. Para lograr esto, la fisioterapia se enfoca en recuperar la funcionalidad física, prevenir complicaciones secundarias y mejorar la autoestima y la motivación.