Un masaje consiste en frotar los tejidos blandos del cuerpo, como los músculos. Un masaje podría ser útil para reducir la tensión y el dolor, para mejorar el flujo de sangre y para estimular la relajación. Por lo general, los masoterapeutas aplican presión con las manos, pero también pueden usar los antebrazos, los codos o los pies. Existen al menos 80 tipos de masajes diferentes. Algunos son delicados, y otros son muy activos e intensos. El masaje sueco es muy suave y suele usarse para estimular la relajación, para mejorar el flujo de sangre y para aliviar la tensión muscular. Las personas usan los masajes para estimular la relajación y para aliviar el dolor. También pueden aliviar la tensión muscular y podrían mejorar el flujo de sangre, aliviar la presión en los nervios y restablecer el movimiento normal de las articulaciones. Cuando se realizan en forma adecuada, se considera que los masajes son seguros. Pero hable con su médico antes de hacerse un masaje si: Tiene heridas abiertas, moretones o zonas de piel débil. Tiene un coágulo de sangre en una vena. Tiene un trastorno de sangrado, un número bajo de plaquetas o toma un medicamento para prevenir la formación de coágulos sanguíneos. Las certificaciones otorgadas por el Consejo de Certificación Nacional de Masaje Terapéutico y Trabajo Corporal garantizan que su masoterapeuta tiene cierto nivel de capacitación y usa determinadas pautas de práctica. Tenga en cuenta que es posible que los masajes sean costosos, generalmente no los cubre el seguro y requieren un compromiso de tiempo. Siempre informe a su médico si está usando una terapia alternativa o si está pensando combinar una terapia alternativa con su tratamiento médico convencional.