Si la mandíbula presenta un chasquido al moverse, no se cierra y abre de la manera habitual o si hay dolor en la parte delantera del oído, es muy importante acudir al médico de manera urgente para que éste pueda valorar el diagnóstico.
Los síntomas más comunes son los siguientes:
Dolor facial o mandibular.
Empeora con el desplazamiento.
Hinchazón facial y hematomas.
Sangrado oral.
Rigidez en la mandíbula.
Dificultad para masticar.
Dificultad para abrir y cerrar la boca correctamente.
Dientes flojos, dañados o que no están alineados apropiadamente.
Mordida torcida o fuera de su sitio.
Dificultad al hablar y pronunciar.
Chasquidos al movilizar la mandíbula.
Si tienes alguno o varios de estos síntomas, es urgente que acudas a la consulta de un especialista para poder arreglar la mandíbula desencajada cuanto antes.
El objetivo de la cirugía es que el paciente pueda recuperar la correcta mordida evitando molestias mandibulares.
Además de estos tratamientos, también existen algunas medidas preventivas para las personas que tienen más predisposición a sufrir esta situación.
Por ejemplo, aplicar calor en la zona es muy beneficioso a nivel muscular.
Este remedio casero es infalible para minimizar las molestias que provoca la mandíbula desencajada y los problemas en la ATM, especialmente en casos donde hay tendencia a la dislocación de la mandíbula.
También es conveniente apostar por técnicas de relajación, ya que ayudarán a reducir el estrés y se eliminará tensión mandibular.
La meditación y el deporte son imprescindibles para relajar la zona y evitar más daños.
Ahora que ya sabes cómo encajar la mandíbula es importante que tengas presente que, en caso de que te ocurra, debes acudir al especialista de inmediato para solucionarlo cuanto antes y evitar así problemas futuros.