:

Importancia del descanso activo diario

Sergio Cuesta
Sergio Cuesta
2025-09-27 07:38:46
Respuestas : 9
0
La importancia del descanso para deportistas es un aspecto fundamental, pero en muchas ocasiones, no es debidamente tomado en cuenta en el entrenamiento deportivo. El descanso es una necesidad vital para el cuerpo y la mente. El descanso adecuado permite que el cuerpo repare los tejidos dañados y previene el estrés excesivo en las articulaciones y los músculos, reduciendo así el riesgo de lesiones. La cantidad de días de descanso necesarios de hacer ejercicio puede variar según varios factores, incluyendo el nivel de condición física, el tipo de entrenamiento, los objetivos personales y la capacidad de recuperación de cada uno. El descanso no se limita únicamente a dormir lo suficiente por la noche. El descanso activo puede implicar la participación en actividades de baja intensidad, como caminar, nadar o hacer yoga, que permiten al cuerpo recuperarse del entrenamiento sin ejercer demasiada presión sobre los músculos y las articulaciones. Por otro lado, el descanso completo implica abstenerse de cualquier forma de ejercicio físico intenso, permitiendo al cuerpo recuperarse completamente. La nutrición juega un papel crucial en el proceso de recuperación. Los deportistas pueden utilizar una variedad de técnicas de recuperación para acelerar el proceso de recuperación y aliviar el dolor muscular, como masajes, terapia de compresión, baños de contraste (alternando entre agua caliente y fría), terapia de electroestimulación muscular, y uso de rodillos de espuma para liberar la tensión muscular.
Juan Zúñiga
Juan Zúñiga
2025-09-27 04:30:07
Respuestas : 9
0
El descanso activo se convierte en una herramienta fundamental para mantener el bienestar físico y mental. El descanso activo propone pausas breves en las que se realizan movimientos suaves, estiramientos o ejercicios ligeros que benefician tanto al cuerpo como a la mente. Beneficios del descanso activo en el trabajo Prevención de dolores musculares y posturales. Las pausas activas permiten liberar la tensión acumulada en el cuerpo, mejorando la postura y previniendo dolores de espalda, cuello y hombros, que son comunes en trabajos de oficina. Aumento de la concentración y la productividad. Al regresar de una pausa activa, la mente está más despejada y enfocada, lo que ayuda a retomar tareas con mayor claridad y efectividad. Reduciría el estrés y la fatiga mental. Moverse de forma ligera activa la liberación de endorfinas, lo que disminuye el estrés y genera una sensación de bienestar. Mejora de la circulación sanguínea. Los movimientos físicos realizados en los descansos activos facilitan el flujo de sangre en el cuerpo, lo que reduce la sensación de pesadez en las piernas y previene problemas circulatorios.

Leer también

¿Cómo mejorar la postura en fisioterapia?

La conciencia postural es fundamental para corregir y mantener una buena postura. Presta atención a Leer más

¿Puede un fisioterapeuta corregir la postura?

La Fisioterapia desempeña un rol fundamental en la corrección de la postura encorvada y en la preven Leer más

Antonio Alcántar
Antonio Alcántar
2025-09-27 03:51:04
Respuestas : 10
0
El descanso activo es fundamental para el cuerpo en aquellas personas que practican actividad física de forma regular, no solo para favorecer la recuperación del organismo sino también para aumentar el rendimiento. El descanso activo consiste en dejar de realizar durante un periodo de tiempo la rutina de ejercicio habitual pero, al mismo tiempo, seguir entrenando o practicar algún tipo de actividad diferente. La clave es mantenerse activo pero sin el nivel de desgaste habitual, lo cual es necesario para evitar lesiones, aumentar la productividad del entrenamiento, incrementar el oxígeno en los músculos y aportarles nutrientes, mejorar la circulación sanguínea, reducir el estrés del entrenamiento habitual e incrementar el rendimiento. Si alguien piensa erróneamente que entrenar todos los días sin descanso y al máximo nivel mejora el rendimiento, la fábula del leñador ayuda a entender por qué el resultado es el contrario. No por llevar a cabo más actividad se es más productivo, de ahí que sea fundamental integrar el descanso activo en la práctica de entrenamiento habitual, para dar descanso al músculo sin pararlo de todo, de modo que cuesta mucho menos volver a arrancarlo. Para una práctica de 5 o 6 días de ejercicio a la semana es recomendable incluir uno o dos días de descanso activo, cuya elección dependerá del estado físico previo de la persona, el tipo de práctica deportiva habitual, la intensidad de la actividad habitual, la cercanía o no de una competición y las propias preferencias del deportista. La clave está en trabajar el cuerpo de forma diferente y sin alcanzar la misma frecuencia cardiaca que en los días de práctica habitual para que el gasto de energía sea menor. Tanto el sistema cardiovascular, como el respiratorio y el músculo esquelético necesitan descanso por eso es necesario una pauta adecuada de descanso intra sesión, inter sesión y a lo largo de la temporada.