Históricamente se ha recomendado la natación intensiva, ya que fortalece toda la musculatura del cuerpo y hace ganar elasticidad y coordinación. En los últimos años se han difundido también muchos ejercicios como el Pilates, ya que trabaja de una forma suave la musculatura erectora del raquis y permite ganar equilibrio, elasticidad. Entre los tratamientos que los traumatólogos de Quirónsalud recomendamos para los pacientes con escoliosis en la columna, podemos mencionar: Actividad deportiva suave regular, centrada en ganar elasticidad, una correcta postura del tronco y una adecuada potenciación musculares. Sin llegar a estar prohibido, no se recomiendan los ejercicios de carga de peso, explosivos o de impacto. Estos aumentan el estrés sobre la columna, pudiendo provocar dolores al no estar las cargas bien repartidas por una columna asimétrica y rígida. En los peores casos, podrían incluso acelerar la progresión de la deformidad. Lo que sí se puede hacer es intentar limitar o retrasar la progresión de la curva lo máximo posible, y para ello se emplea una combinación de higiene postural, potenciación muscular y elasticidad ligamentosa y , en curvas que ya superen los 20º, el empleo de ortesis correctoras y corsés.